El concepto de “Agile” va más allá de la implementación de metodologías de trabajo y la incorporación de tecnologías a procesos empresariales, es una cultura que supone una forma distinta de trabajar y de organizarse en equipos efectivos. Este concepto integrado a la gestión de conocimiento motiva a las organizaciones a trabajar de manera articulada en torno a la generación de nuevo conocimiento, aprovechando los aprendizajes organizacionales.
Existen diferentes técnicas para gestionar el conocimiento en las organizaciones y lograr que los conocimientos tácitos se ubiquen en los explícitos y de esta manera transformar a las empresas. Los métodos ágiles tienen como fin dinamizar la socialización, comunicación y el compartir conocimiento valioso dentro de la organización.